5 cosas sobre el sueño infantil que hubiese deseado saber antes
Recuerdo que cuando estaba esperando la llegada de mi hijo, recibí mucha información sobre el embarazo, el parto, el postparto y sobre cómo cuidar a un recién nacido principalmente. Toda esa información me sirvió mucho, y estoy agradecida de haber podido contar con la posibilidad de estar bien informada, solo que ahora, echando la vista atrás, claramente lamento no haber tenido, recibido o buscado asesoramiento sobre cómo es y funciona el sueño infantil.
Nadie nos prepara para ello cuando estamos embarazadas, es más, recibimos comentarios del tipo: “aprovecha a dormir antes de que el bebé nazca” o “prepárate para no pegar ojo en los próximos tres años” y dejando de lado el toque de humor con el que se sueltan estas frases, la realidad es que asumimos y nos resignamos que tener un bebé pequeño es igual a no dormir durante los primeros años y lo peor, que no podemos hacer nada al respecto para cambiarlo. Y es justo en esto último donde no estoy del todo de acuerdo.
A ver, es lógico y no podemos esperar a que un recién nacido duerma toda la noche del tirón, entre otras cosas porque tiene que alimentarse cada pocas horas, pero a medida que va creciendo, podemos ir estableciendo hábitos saludables de sueño que nos ayudaran en un futuro a que tanto el cómo el resto de la familia tenga un descanso de calidad. Quizás no podemos evitar que se despierte, pero teniendo el asesoramiento adecuado sabremos qué hacer para gestionar los despertares y reducirlos, tal vez no podemos prevenir que sufra una regresión, pero sin duda sabremos como afrontarla y sobreponernos a ella por ejemplo.
La falta de sueño tiene múltiples consecuencias para la salud, así que por favor, si sientes que necesitas ayuda o deseas cambiar algo de tu presente: INFÓRMATE, busca asesoramiento profesional y no asumas que no puedes hacer nada para mejorar tu situación.
Dicho esto, ahora paso a contarte las 5 cosas sobre el sueño infantil que me hubiese encantado saber antes…
Allá vamos…
¿Quien soy?
Una madre que tuvo problemas de sueños con su hijo bla bla bla bla bla.
Los ciclos de sueño duran entre 45-60 minutos, y se reparten en solo dos fases
Ciclo de sueño
Los ciclos de sueño de los bebés tienen una duración de entre 45-60 minutos, repartidas solo en dos fases, sueño REM y sueño profundo, a diferencia de los adultos que tenemos 5 fases de sueño. La duración del ciclo está directamente relacionada con las necesidades propias del ser humano, así, los recién nacidos pueden despertarse con facilidad cada poco tiempo para poder alimentarse. Recordemos que el tamaño del estómago de un bebé es muy pequeño y necesitan comer cada pocas horas.
Fases del ciclo de sueño
Como hemos dicho, los bebés solo tienen dos fases y no es hasta los 4 meses cuando su sueño comienza a evolucionar, adquiriendo las tres fases que le faltan para asemejarse al sueño que tendrán en la vida adulta. Claro está, esto no acurre de la noche a la mañana, es un proceso que se va desarrollando y que lleva su tiempo aprender a gestionar. Es por eso que es muy probable que cuando hayan finalizado un ciclo tengan un despertar y necesiten de nuestra ayuda para volver a dormirse. Esto ocurre porque aún no han aprendido a enlazar los ciclos solitos.
Ventanas de sueño
Es el tiempo máximo que un bebé puede estar despierto entre sueños sin llegar al sobre cansancio, es decir, desde que se despierta por la mañana hasta su primera siesta, desde que se despierta de su primera siesta hasta la segunda y así sucesivamente. Las ventanas de sueño varían según la edad del bebé, a mayor edad, más amplia será es decir que podrá estar más tiempo despierto entre sueños. Resulta una herramienta muy útil ya que nos ayudará a evitar el sobre cansancio y a saber cuándo es un buen momento para ponerlos a dormir.
Las ventanas de sueño varían según la edad del bebé
Un bebé que normalmente dormía bien comienza a tener despertares nocturnos inusuales
Regresiones de sueño
Si, sé que “regresión” suena negativo y por ende a algo que debemos temer, y si bien no te miento si te digo que algunas regresiones pueden ser difíciles, también te digo que son pasajeras, y que no todos los bebés las atraviesan. Ahora, ¿que son las famosas regresiones? Son períodos de tiempo en donde el sueño de los más pequeños se altera debido generalmente a que están atravesando algún hito de desarrollo. Así pues, un bebé que normalmente dormía bien comienza a tener despertares nocturnos inusuales, problemas para hacer sus siestas o la duración de las mismas comienza a variar por ejemplo. Ahora tengo tres buenas noticias para darte. La primera es que pese a la connotación negativa que conlleva su nombre, las regresiones no son más que una señal que nuestro hijo se está desarrollando y evolucionando correctamente. La segunda es que no todos los bebés las padecen y la tercera es que una vez la regresión haya pasado, la inmensa mayoría de los niños vuelve a dormir como solía hacerlo.
Muletillas de sueño
Llamamos muletilla de sueño a toda acción u objeto que necesitan hacer o tener los bebés para poder dormirse. Entre las más comunes encontramos mecer, amamantar, darle el biberón, el porteo, el chupete etc. Cuando un bebé se sirve de un apoyo para conciliar el sueño es probable que en cada despertar nocturno que tenga reclame la misma acción para volver a dormirse ya que no ha aprendido a hacerlo de otra manera. Esto no significa que las muletillas sean algo negativo, pero debemos tener presente que si queremos que nuestro pequeño tenga un sueño más autónomo, tendremos que ir gradualmente dejando de utilizarlas.
Señales de sueño
Los niños suelen manifestar su cansancio de diversas maneras dependiendo de su edad. Conocer estas señales de sueño nos ayudará a saber cuándo es el mejor momento para poner a dormir a nuestros hijos y de esta manera evitar acostarlos sobre cansados. Los bebés pueden expresarlas de distintas maneras, pero aquí te dejo algunas señales que son muy comunes:
Frotarse los ojos
Bostezo
Cejas rojas
Tirarse de las orejas
Movimientos involuntarios de manos y piernas
Pérdida de interés de su entorno
Llanto
Mirada perdida
Arquea la espalda
Menos coordinación
Hiperactividad
¿Pero qué pasa cuando llegamos tarde y nuestro bebé se encuentra sobre cansado?
Pues que dormirlo se volverá mucho más difícil y largo que de costumbre. Esta situación puede traducirse en la típica frase que todos hemos escuchado alguna vez…”mi bebé está muerto de sueño pero no se duerme” o “mi hijo está pasado de vueltas” ¿te suena?
Así que observa a tu bebé para saber cuáles son las señal que expresa y sirviéndote además de las ventanas de sueño, conseguirás ponerlo a dormir en el momento ideal.
Sé cómo la falta de sueño puede afectarte física y mentalmente, sé lo que se siente enfrentarse a cada noche sabiendo que no vas a dormir bien pero al mismo tiempo con la esperanza de que esta sea la noche en la que todo va a cambiar, y sé también lo frustrante y desesperante que es no ver progresos ni cambios…
Si estas pasando por lo mismo y deseas que te ayude, debes saber que estaré feliz de poder conocerte y hablar contigo.
Espero haberte ayudado y nos vemos en la siguiente publicación.
Yesica Wilches Gatica,
Coach Certificada de Sueño Infantil.